Qué maravilloso fin de semana tuvimos en este palacio de ensueño! La decoración es exquisita y la habitación era amplia y acogedora, con una encantadora sala de estar. Los desayunos en el comedor principal fueron una delicia, con croissants deliciosos. Además, la ubicación era perfecta para explorar la hermosa campiña de Bretaña y Normandía.

Aunque es difícil encontrar puntos negativos en este lugar encantador, el único detalle que podría mencionar es que el desayuno tenía una opción limitada para los que preferimos algo salado. Sin embargo, esto no arruinó nuestra estancia en absoluto y seguimos disfrutando de la tranquilidad y la belleza de este lugar increíble.

Un Chateau maravilloso! Estuvimos de paso hacia Vannes y fue ideal para descansar en un lugar sumamente tranquilo. La atención del dueño fue excelente, a pesar de que solo hablaba francés, hizo un gran esfuerzo por entendernos y ayudarnos. El desayuno en la sala típica de un Chateau fue delicioso. El castillo está ubicado en lo alto de una colina, ofreciendo unas vistas espectaculares del campo circundante. La habitación era amplia y tenía bonitas vistas, con una decoración clásica algo kitsch. Además, el Chateau cuenta con una piscina de temporada y un amplio jardín con varias edificaciones.

Recomendaría a todos este lugar.

Siempre vuelvo a este hotel en Fleurigné porque me siento como en casa. La primera vez que me alojé aquí, el personal fue muy amable y atento con mis padres ancianos. Tiene todas las comodidades que necesito: Wi-Fi gratis, estacionamiento en el lugar, sala de ocio/TV, solo para adultos, check-in/check-out exprés. Definitivamente, volveré para otro fin de semana.

Siempre vuelvo al mismo hotel en Fleurigné porque el personal es servicial y me devolvió mis auriculares olvidados la primera vez. Además, tiene Wi-Fi gratis, estacionamiento gratuito, sala de ocio, check-in/check-out exprés. Es perfecto para viajes de negocios.

La decoración impresionante, paisaje bonito desde las habitaciones, desayuno delicioso en salón espectácular, tranquilidad y amabilidad del dueño, gatos cariñosos.

Nada, todo fue perfecto.

La decoración del Chateau es increíble, cada detalle está cuidado. Las habitaciones ofrecen vistas hermosas y el desayuno se sirve en un salón espectacular. Aunque no pudimos comunicarnos mucho con el propietario debido al idioma, su atención fue excelente. Dormir en el Chateau fue una experiencia tranquila y relajante, y el baño era una maravilla.

Para nosotros, la comunicación con el propietario fue un desafío debido al idioma 🙁. Mencionar que para los demás todo fue ideal.

El alojamiento y sus alrededores son impresionantes. El paisaje es muy bonito y el ambiente es tranquilo. El edificio antiguo tiene muchos detalles encantadores. Hay un aparcamiento cómodo. Las habitaciones son grandes y bien equipadas, y la decoración te transporta a otra época. El trato del dueño es exquisito y el desayuno es copioso y se sirve en una gran mesa compartida con el resto de huéspedes.

Me sentí realmente atendido, no tengo ninguna pega.

La habitación en la que me alojé en Chateau De Montbrault fue simplemente encantadora. Tenía una decoración clásica con suelos de madera, lo que le daba un ambiente acogedor. Además, la vista al campo desde la habitación era realmente impresionante. me gustó mucho la cama con dosel, ¡se sentía como si estuviera durmiendo como la realeza!

Quizás a algunos no les guste que la habitación tenga una televisión de pantalla plana con canales por cable. Pero personalmente, prefiero desconectar y disfrutar del tranquilo entorno del campo sin la distracción de la televisión.

Increíble experiencia en un chateâu! Dormir sin ruidos con vistas preciosas, decoración bonita y cuarto de baño de ensueño. El anfitrión amabilísimo, desayuno extraordinario y entorno tranquilo en plena campiña. Especial y distinto a los hoteles convencionales.

Siempre vuelvo a este hotel en Fleurigné porque la primera vez me ayudaron con problemas técnicos. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratuito, aparcamiento gratuito, sala de ocio/TV, solo para adultos, check-in/-out exprés. Volveré para unas vacaciones.

Mi estancia en el Chateau De Montbrault fue maravillosa. Desde el momento en que llegué, me sentí transportado a otra época. La decoración del castillo, llena de antigüedades, era simplemente impresionante. Tenía acceso a todas las áreas comunes, lo que me permitió explorar y disfrutar de cada rincón del lugar. La tranquilidad que se respiraba era incomparable, perfecta para relajarse. El dueño, a pesar de no hablar inglés ni español, hizo todo lo posible por comprenderme y ayudarme. La habitación era espaciosa y te transportaba a otra época. El desayuno, servido en un salón espectacular, era delicioso, aunque me hubiera gustado tener más opciones caseras y frescas. En resumen, recomendaría este hotel sin dudarlo.

¡Una estancia realmente única en un castillo! Me sentí como si estuviera viviendo en un cuento de hadas con las impresionantes vistas al campo desde mi habitación. Definitivamente, una experiencia que no se encuentra todos los días.

La limpieza podría mejorar.

La experiencia en Château de Montbrault fue simplemente encantadora. Estaba rodeado de un hermoso parque de 10 hectáreas, con estanques naturales y estatuas, ¡como un jardín de cuentos de hadas! Mi habitación, decorada de manera clásica, ofrecía una vista impresionante del campo. Me sentí como si estuviera en mi propio castillo privado, especialmente porque mi habitación tenía una cama con dosel que te transportaba a la época medieval. En definitiva, fue una estancia increíble en un entorno mágico.

El único detalle menor fue la ducha en el baño. Si bien estaba limpio y en buenas condiciones, personalmente hubiera preferido una bañera clásica en lugar de una ducha moderna.